En el siglo XIX, gran parte de Estados Unidos era un territorio virgen, habían pocas ciudades construidas. En el 1804 Chicago era un fuerte, más adelante se parcela y se empieza a construir, la ciudad avanzaba y se hacía más fuerte, el sueño americano de libertad e individualismo se solidificaba. Se comienza a crear un tipo de mobiliario catalogado como mobiliario patentado: muebles móviles, adaptables y funcionales, cada idea se patentaba para no ser copiada. Los pioneros en crear este tipo de muebles, austeros y funcionales, fueron los integrantes de la Comunidad Shaker, creada en 1840. Liderados por una mujer inglesa, Ann Lee, los Shaker fueron una de las numerosas sectas utópicas que emigraron al Nuevo Mundo a finales del siglo XVIII. Creían en un deseo de uniformidad de estilo en todas sus comunidades. Los pueblos Shaker estaban caracterizados por la extrema simplicidad en sus construcciones. Construían en base a “una arquitectura sin adornos”. Los Shaker construían muebles y utensilios no sólo para su uso personal sino también para la venta. Era una forma de vida y de distracción junto con su alto conocimiento sobre plantas, especialmente medicinales, jardinería, mermeladas y semillas. Impulsados por sus creencias religiosas, los Shaker buscan la perfección a través de la austeridad. Por ello, su artesanía adopta las formas sencillas, claras, atractivas y útiles propias de la obra bien hecha, siendo la armonía de las proporciones su característica más notable y peculiar. Son muebles muy funcionales, sin adornos superfluos. Crearon muebles adaptables con nuevos “gadgets” como por ejemplo pequeñas ruedas en las patas para facilitar su desplazamiento. Se les considera los pioneros en crear muebles minimalistas. Se puso de moda este tipo de mueble porque engloba la idea americana de comodidad, confort y el control de la silla, tu tienes el control y se adapta ella a ti. Transmite una sensación de superioridad, a la vez que se crea una silla única ya que cada uno tiene sus necesidades, la silla se adaptará a cada una de ellas y se crearan diferentes modelos.
Relaciones entre las dos sillas:
Entre esta nueva moda de crear sillas ajustables y móviles destaca el diseñador británico William Morris. Fue artesano, impresor, poeta, escritor, activista político, pintor y fundador del movimiento Arts and Crafts. Era un estilo que deploraba la estética de la industrialización, así como sus efectos sociales. Revindicaba nostálgicamente los modelos de artesonado de los gremios medievales. El diseño de un mueble debe adecuarse a su función y ser práctico. Los materiales y el método deben ser los más apropiados y reflejar el sello del diseñador, el estilo se basaba en: simplicidad, esplendor, naturaleza y color-textura. Morris emprendió la tarea de recrear una industrial manual en la era de la maquina, produciendo su empresa “Morris and Company” telas, tapices, papeles pintados y muebles, con los cuales su empresa fundada en 1861 llamada Morris, Marshall, Faulkner & Co. y formada por Dante Gabriel Rossetti, Burne-Jones, Madox Brown y Philip Webb, haría renombre. Uno de sus productos más famosos y novedosos fue la Morris Chair, creada en 1866. Esta silla era uno de los primeros modelos de mueble reclinable. El diseño se basa en unos reposabrazos reclinables, así como el asiento y el respaldo gracias a sus escondidas bisagras. La silla original se componía por un color oscuro y una tapicería al estilo Victoriano. Se basa totalmente en el estilo de Arts and Crafts, artes y oficios. Su estructura está compuesta por madera de roble. Suponía un avance enorme, se sacaba al mercado una silla que aparentemente era estable pero respondía a múltiples funciones. Está silla es una clara influencia del trabajo que realizaría posteriormente Sheldon y próximamente Le Corbusier. Desde Chicago, Sheldon, observó como este movimiento, a nivel internacional, se desenvolvía entre los distintos diseñadores, los muebles patentados eran el futuro. Se inspiró en la Morris Chair, en sus ajustes y sus posibilidades, y en 1873 empezó a crear una nueva silla ajustable que pudiera mejorar las prestaciones de las demás sillas. Sheldon trabajó desde un principio en la funcionalidad en diversos campos como en los transportes públicos ya que creó una especie de asiento reclinable entre cada sillón del tranvía. Ahora quería crear su propio modelo y patentarlo. Y así es como en 1876 terminó una nueva silla ajustable con infinidad de posibilidades. Uno de los nuevos cambios también fue el elemento base del mueble, usó hierro fundido en vez de madera de roble como Morris.
Por otra banda el hijo de Morris, Larkin Morris, tenía una empresa dedicada a la venta de jabón. Gracias a eso pudo obtener capital y crear otra silla ajustable, siguiendo los pasos de la Morris chair, incluso copiando el mismo material base, el roble, pero el precio del mueble era más barato, así vendió, en un año, medio millón de piezas de su mueble más famosos, con su sistema patentado de nuevo, la Chautauqua chair, distribuida a principios del 1895. El cabezal, el asiento, el reposapiés… estaban tapizados con la felpa de seda con diferentes variantes: carmesí, marrón tabaco, oro y azul. El precio era tan económico porque la venta se hacía de fabricante a consumidor directamente. Se definía como: “puede ser ajustable desde cualquier posición y cambiada por el ocupante cuando quiera, es reclinable. Un sinónimo de lujo y comodidad.” Una frase parecida a la que presentaba la marca de la silla de Sheldon. Podemos decir que la Chautauqua chair se inspiró en la estructura y forma de la Invalid Chair. A partir de Larkin Morris y su silla encontramos una de las múltiples relaciones directas con Le Corbusier, más tarde comentaré otras relaciones con la Morris Chair, predecesora de la Chaise Longue.
La compañía de diseño industrial de Larkin se denominaba Larkin Soap Company, y su secretario era Darwin D. Martin, influido también por las ideas del diseño que Larkin Morris proyectaba, sobretodo por su modelo estrella, la silla Chautauqua. Contactó con Frank Lloyd Wright para que le creara una vivienda, la Casa Darwin D. Martin, construida entre 1903 y 1905 y situada en Buffalo, Nueva York. Frank Lloyd Wright también diseño hogares para más empleados de la misma compañía como William R. Health, y Walter V. Davidson. Durante los siguientes años se forjó una gran amistad entre Wright y Martin, hasta tal punto que los Martin prestaron ayuda financiera y apoyo a Wright cuando su carrera estaba despegando. Durante este tiempo Lloyd Wright se vio influenciado por la obra de la compañía de Larkin Morris. Por otra parte, Le Corbusier, en 1907 viaja a Alemania a estudiar las nuevas corrientes arquitectónicas, allí trabajó en la oficina de Peter Behrens, donde coincidió con Ludwig Mies van der Rohe y Walter Gropius, futuros creadores de la escuela Bauhaus, de la que también después hablaremos. Después de unos meses se dirige hacia Estados Unidos, donde se familiarizó con la obra de Frank Lloyd Wright, que por aquel entonces era amigo íntimo de Darwin D. Martin. Lloyd Wright, en sus inicios, plasmaba en sus obras una influencia de esa compañía, y esa influencia de Larkin Morris fue vista por Le Corbusier, que a partir de Lloyd Wright, contactó con el estilo de Larkin Morris. Es decir, en sus proyectos, en especial la chaise lounge, es influenciado por la Invalid Chair ya que ésta, marcó en Larkin Morris y este a Frank Lloyd Wright, y este por último a Le Corbuiser y su obra.
Otra de las relaciones es que la Morris Chair influenció a la Invalid Chair y a la Chaise Lounge. En la primera ya hemos visto como, ahora lo veremos en la segunda. Josef Hoffmann fue un arquitecto y diseñador industrial austríaco. En 1879, se inscribió en la escuela media estatal de la ciudad de Jihlava, Moravia. Los padres tenían la intención de prepararlo para los estudios jurídicos. Algunos años más tarde, demostró especial interés por las artes y el diseño, y sus padres le inscribieron en el instituto Superior de Artes y Oficios de Brno. Desde el año 1892 frecuentaba los cursos de la Academia de Artes en Viena. Al mismo tiempo asistía a menudo al teatro y se relacionaba mucho con los artistas y escritores de su generación. En 1895, Hoffmann obtuvo su diploma. Algunos meses más tarde emprendió viaje a Italia. Visitó Verona, Vicenza, Venecia, Florencia, Roma y Nápoles. Cinco años después el director de la escuela envió a Hoffmann a Londres, donde entró en contacto con la escuela inglesa. Allí se interesó por la obra de William Morris y Philip Webb, sus diseños y sobretodo la famosa Morris Chair. Se influencia mucho de su estilo, de la corriente Arts and Crafts, es por eso que en 1903 crea la Sitzmaschine, literalmente la máquina para sentarse. Esta silla hace una clara referencia a ese movimiento y al de las sillas ajustables-regulables siguiendo el estilo Arts and Crafts de William Morris y Philip Webb, diseñador de la Morris Chair. En 1907 conoció al arquitecto francés, Le Corbusier, en Viena, donde Hoffmann compartió con él, toda sus ideas sobre el movimiento Arts and Crafts, las sillas ajustables-regulables y el estilo de William Morris y Philip Webb, así Le Corbusier descubría este movimiento y estilo, quedando impactado e influenciado en sus posteriores obras. En esta relación también se unen las dos sillas principales -Lounge Chair e Invalid Chair- con las sillas ajustables del estilo de la compañía de William Morris.
La Bauhaus mantenía un contacto muy directo con Le Corbusier, los dos tenían posturas similares: racionalistas y eran los más claros exponentes del Movimiento Moderno en la arquitectura. La Bauhaus en su inicio de clases dio un discurso, en 1919, definiéndose como una escuela en la cual la artesanía y el arte iban ligados, esto significa que el estilo Arts and Crafts creado por William Morris estuvo presente siempre allí. Definiéndose así también influyeron y marcaron más estilo de Le Corbusier, ya que este seguía los movimientos de la Escuela.
Conclusión:
Como hemos podido observar, las dos sillas, a pesar de su diferencia en los años de creación, mantienen un mismo estilo y espíritu. Cada silla se adapta a los materiales predominantes en sus respectivas épocas, con algunas partes estéticamente diferentes, pero aun así las dos tienen un mismo objetivo: ser una silla cómoda, funcional, ajustable y regulable. Las dos responden al movimiento Arts and Crafts, con pequeñas variaciones debido al tiempo transcurrido, responden a un diseño útil. Las dos están unidas directamente por el diseño de William Morris y su estilo. También por el movimiento que nació en Chicago de crear muebles patentados, ajustables y móviles. Ya sea desde Frank Lloyd Wright, Josef Hoffman o La Bauhaus, estas dos sillas tienen muchas cosas en común, un mismo espíritu y objetivo, algo que les relaciona, y la mayoría de veces de manera directa.
